Con el Budo en el Corazón (Parte II)

Con el Budo en el Corazón (Parte - II)

Qué mejor epílogo para un Tai Kai que fue todo un  "brillo" de esperanzas e ilusiones que un buen entrenamiento en Lunes Festivo.

Pues allí estaban de nuevo. Los guerreros del Tatsujin Dojo. Preparados para lo que sería una última sesión de dinámica aplicada al Kihon Happo con Hanbo. Pues cómo sino íbamos a cerrar un Tai Kai en el año del Kihon Happo sino con sus "infinitas" adaptaciones....





Todo el mundo participó con gran empeño y mucha dedicación demostrando una vez más su predisposición para aprender, de la mejor, sino la única manera posible PRACTICANDO. En el Budo de Hatsumi Sensei el entrenamiento es la base de todo: "...dejen espacio para la filosofía, pero no se pierdan en ella..."

Tuve el honor de como en la sesión del domingo contar con la inestimable presencia del Maestro de Karate Flover. Dispuesto donde los haya a compartir experiencias y práctica, como he dicho antes.
Todos fuimos miembros de un solo sentimiento, nuevamente, el Budo en el Corazón. Y es que sentirse arropado por tanta gente que ama y practica Bujinkan es un privilegio. Pero además cuando uno recibe a practicantes, maestros, de otra u otras Artes Marciales comprueba que hay un feeling genérico en la mayoría de ellos, de todos nosotros. Es el Amor a lo que hacemos y el respeto por ello. De ahí que los Bûyû (amigos marciales) existen allá donde se practique cualquier Arte Marcial. Pues el sentimiento de un Verdadero Guerrero  no difiere de otro: "El Amor a la Vida..., no al combate".

Después de comer, reposar un poco y preparar la maleta, nos dispusimos a salir hacia Melgar. Pues allí era mi próximo destino para el día martes 8 de Noviembre.
Tras viajar durante varias horas y debido a que nos desviaron por carreteras tortuosas. Llegamos a nuestro destino, Melgar. Donde nos esperaba un merecido descanso en el Hotel Almirante, todo un complejo "Fantástico". 

Amaneció el día lluvioso, pero allí nos esperaba un pelotón de policías, en las dependencias de la Comandancia de Policía. 
Donde impartí más que una clase una "demostración práctica". Bueno, una detrás de otra, porque el sargento de la unidad no hacía más que enviarme cadetes para "comprobar" la eficacia de nuestro Budo en "persona". 

Gracias al cielo no hubo que lamentar heridos, pues aquellos chicos eran verdaderos guerreros de las calles. Y como digo siempre: "Ante situaciones extrañas, parece que la "Sombra y el Espíritu del Sôke me acompañan...". Y todo terminó con una Sonrisa, bueno muchas. Además de efusivos abrazos y gran respeto por nuestro Arte. 

Hacer una mención especial a la Drª Leyla Parra,  ya que sin su mediación con el Ayuntamiento de esta ciudad no podríamos haber realizado este especial y enriquecedor encuentro. Sirvan estas letras como medio de agradecimiento para ella, por su entrega, dedicación e interés en pro de la Bujinkan en esta ciudad. Hasta otra, Melgar.

Alejandro Estrada y yo mismo con la Concejala de Sanidad del Excmo. Ayuntamiento de Melgar. Y placer, un honor y un privilegio, el contar con su presencia durante toda la clase.